Santo Domingo, El Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenó a 30 años de cárcel a Abraham Frías Berroa (alias Monky), hallado culpable de asociarse con una mujer para asesinar a su expareja, a la que asesto varias puñaladas, informó hoy la Fiscalía en un comunicado.
La acusación precisa que en la madrugada del 12 de marzo de 2017, la víctima, Desiré Hernández, estaba compartiendo con unas amistades en un centro de diversión del Ensanche Luperón, lugar al que llegó el acusado, que se sentó con el grupo.
Posteriormente, y en el momento en el que la víctima sacó su celular para tomarse una fotografía, Frías Berroa se echó encima de su expareja y empezó a agredirla.
Los amigos de la joven intervinieron para ayudarla y los miembros de seguridad del centro nocturno procedieron a sacar al acusado del lugar, según explicaron ante el tribunal los procuradores fiscales litigantes Mereline Tejera Suero y Johnny Núñez Arroyo.
Una vez fuera, el condenado le manifestó a la amiga de su expareja: «Dile a ella (la occisa) que me entregue mi celular y que se cuide que si yo la agarro la mataré».
Luego, cuando la víctima y sus amistades se retiraban del lugar, Frías Berroa se presentó junto a la imputada Yokasta Reynoso, que se encuentra prófuga, portando ambos armas blancas.
Los fiscales indicaron que, sin mediar palabra, el acusado y la imputada asesinaron a la Desiré, asestándole varias estocadas en distintas partes del cuerpo, y Reynoso, además, le propinó un botellazo a la víctima, mientras yacía en el suelo mortalmente herida.
Acto seguido, los agresores se dieron a la fuga, siendo perseguidos por un grupo de personas que lograron atrapar al condenado.
El Ministerio Público otorgó al caso la calificación jurídica de asociación de malhechores, asesinato, porte y tenencia ilegal de arma blanca, delitos por los que Frías Berroa cumplirá la sentencia en la Cárcel 15 de Azua.EFE